En los próximos días llegarán las esperadas y anheladas vacaciones que, aunque no son tan amplias como las de fin de año, es un tiempo en donde se pone en pausa las rutinas y nos olvidamos un poco del día a día de los últimos 5 meses.
Las vacaciones llegan en un momento en donde normalmente el cuerpo pide hacer una pausa para sentirnos con menos presión y libres de alguna manera.
El tiempo de vacaciones no significa abandonarnos, ni tampoco debe ser sinónimo de excesos y abandono de hábitos; es todo lo contrario. Tomar un descanso debería significar reconectar, respirar, escucharnos y recargar baterías para lo que viene.
Es importante que las próximas vacaciones de nuestros niños no solamente sean vacaciones divertidas, sino que sean saludables. En donde se tengan espacios que les ayuden a sanar, reír y tener actividades físicas.
Buscando tener días llenos de momentos agradables y sanos para nuestra familia te recomendamos algunos puntos a tomar en cuenta.
- Cuidar la energía: las vacaciones no deben convertirse en un listado de cosas por hacer de manera obligatoria, es importante utilizar las vacaciones también para descansar sin sentir culpa alguna. Dormir bien, leer un libro que nos guste, desconectarse del mundo exterior debería ser parte de este tiempo de descansar.
- Comer rico: mantener un equilibrio con la comida nos hace sentir mejor en los días libres; por eso nos podemos dar gustos que normalmente no nos damos al probar nuevos sabores y opciones saludables que nos hagan sentir bien.
- Moverse: moverse es importante para la salud por eso en vacaciones este tema no debe quedarse atrás, mientras estamos inclusive fuera de casa debemos buscar actividades que nos ayuden a liberar tensión, mejorar el ánimo y conectarnos con el presente.
- Desconectarse: desconectarnos nos ayuda a mejorar nuestra salud mental, por eso en este tiempo es importante conversar sin interrupciones, estar presente con nuestros chicos o simplemente dejar nuestro celular o aparatos electrónicos de lado.
- Cultivar momentos: que bonito es poder recordar esos abrazos, esas risas, esos momentos que durante nuestra niñez nos daban momentos de felicidad. Y si estos momentos fueron importantes para nosotros porque no enseñamos a cultivarlos en nuestros niños; sería un buen momento para hacerles saber lo felices que éramos mientras disfrutamos estos momentos.
- Descansar: dormir bien no es un lujo es una necesidad, el cuerpo necesita tiempo para recuperarse, por eso en vacaciones también se debe planificar el tiempo de descansar.
Salir de vacaciones debe ser un momento de equilibrio en donde podamos reír, llorar, gozar, jugar, entre muchas otras actividades que podamos hacer; sin embargo, estar de vacaciones también significa cuidarnos por eso debemos balancear nuestra salud física, emocional y diversión con el fin de sentirnos más livianos.