Cuántas veces hemos sentido que lo que pasa a nuestro alrededor es demasiado para nosotros; todo parece estar fuera de lugar como las emociones, el trabajo, lo que tenemos pendiente, nuestras propias palabras entre muchas otras cosas con las que vivimos día a día.
Las ganas de rendirse que nos llegan en ese momento en muchas ocasiones es nuestra única salida en muchas ocasiones, pero ALTO; esto jamás debería ser una opción a pesar de sentir que no tenemos fuerza alguna para salir adelante.
Muchas veces pensamos que este mal momento se alejará de nosotros al realizar acciones como hablar del tema, leer un libro, reunirnos con un profesional pero que hacemos si estas acciones tampoco nos funcionan. A veces tenemos a nuestro alcance una solución práctica, que al tenerla tan cerca hace que sea casi nulo el pensar en ello y verlo como una solución pronta.
Tomar una siesta, es una buena idea. Una siesta nos ofrece beneficios como relajarnos, tener menos cansancio, contar con más atención, mejorar el estado de ánimo y mejorar el rendimiento.
Dormir no significa olvidar, rendirnos o darle paso a la pereza NO; dormir según algunos estudios significa que nuestro cerebro en vez de apagarse más bien aprovecha para reorganizar ideas, procesar emociones e inclusive reiniciar el sistema nervioso.
Por eso tomar una siesta de 30 minutos nos puede dar herramientas importantes para el día a día como son mejorar la concentración, disminuir la ansiedad y dar claridad en momentos en donde todo parecía no tener salida.
Vivimos en una sociedad en donde lo más importante es ser productivo en donde descansar y perder tiempo es mal visto inclusive en algún momento hemos escuchado a alguien decir que descansar es para los débiles; pero esto está muy lejos de la verdad y realidad.
Las personas nos estamos acostumbrando a vivir sin parar y esto lo único que nos trae son problemas emocionales y físicos, por eso el descanso como se indicó anteriormente resulta un acto de respeto y amor para nosotros mismos.
Los expertos recomiendan respirar, cerrar los ojos y dormir un rato antes de llegar a ese momento que nos sobrepasa y esto no significa que todo se solucionará, pero sí que podamos ver las cosas con más claridad y así poder tomar decisiones importantes con cabeza fría.
Ignorar señales del cuerpo como dolor de cabeza, agotamiento emocional o inclusive esa sensación extraña en nuestro estómago es auto sabotearnos debemos aprender a escucharnos a nosotros mismos y ser precavidos de alguna enfermedad que llega por estar sobrecargados de problemas; por eso el consejo de parar respirar y tomarnos una siesta es una buena opción para renovar fuerzas para seguir adelante.